Mayoría de veces restamos importancia al peso de la entrevista a la hora de acceder a un PT. Tan solo conociendo bien una serie de pautas muy sencillas podremos optar con mayores garantías a ser parte activa en la empresa. Algunas claves básicas, pero importantes:
- Actitud positiva, sinceridad, precisión y claridad. Saber vendernos no es baladí, pero siempre sin perder la humildad y nuestra esencia.
- No improvisar. Debemos hacer una reflexión (previa a nuestra entrevista) respecto a cómo se desempeña el trabajo a realizar; esto es, expresar nuestra valía sin hacer alardes innecesarios.
- Participar desde una visión optimista de resultados, tener carácter y no conformarnos, aportar, suponer un valor añadido a la empresa….
- Aprovechar los silencios y su “tratamiento”; esto es, no dejarnos intimidar por esos vacíos incómodos y estar preparados para afrontar esta reacción ante el estrés que producen los mismos.
Algunos trucos: Un cambio brusco en el ritmo y la temática de la entrevista puede dejar fuera de juego al candidato. Ante esta situación debemos estar tranquilos y mostrar en todo caso interés por la compañía y el puesto que se desea cubrir. Otro factor a tener en cuenta es la adecuada gestión que hagamos de nuestro tiempo de trabajo o, lo que es lo mismo, la adaptación a los ritmos de la empresa bajo presión. En todo, lo que primará será el nivel de coherencia y sinceridad del candidato.
Unos de los problemas que más afectan a nuestra materia prima –los jóvenes- (especialmente manifestado ayer en varios momentos del Taller) es la sobrecualificación académica. ¿Cómo salvar esta situación ante una entrevista de trabajo? Lo que debemos es hacer hincapié en las ventajas y resaltar la experiencia que poseemos con argumentos sólidos para mostrar seguridad al entrevistador y que observe que ambas partes -empresa/trabajador- saldrán beneficiados de esa situación. La clave es alejar de nuestro interlocutor los miedos de que podamos “alzar el vuelo” cuando encontremos algo mejor, analizar y mostrar que conocemos la dinámica de la empresa y que nuestras expectativas con ella no son efímeras en el tiempo.
Ante todo, antes de hacer una entrevista de trabajo, será clave realizar un ejercicio de autoconocimiento personal, una especie de análisis DAFO tanto a nivel profesional como personal de cara a tener una visión global de la empresa y poder disponer de una capacidad de reacción mayor ante la temida entrevista. En síntesis, hacer todo lo anterior pero sin olvidarnos de nuestro bagaje (experiencia, interés y conocimientos), continuar aprendiendo e intentar mejorar.
Cerrar con un vídeo currículo que muestra el potencial que puede llegar a tener el ser humano, un ejemplo de lucha y superación. Otra muestra de que querer es poder:
http://www.youtube.com/watch?v=ODuZadx4HzM
Animaos y aprovechad los diversos mecanismos y recursos existentes en RRSS a los que os iniciéis por vez primera en este apasionante mundo, tanto a los que optéis por emprender como a los que os decantéis por la empresa privada. A por nuevos desafíos profesionales!!!
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